Revela diputada Brenda Ríos operación irregular de empresa fachada en contrato de laboratorio clínico

En rueda de prensa, la diputada local Brenda Ríos, acompañada por los exlegisladores Marco Quezada y Miguel La Torre, denunció un caso grave de simulación empresarial, conflicto de interés y presunto uso indebido de recursos públicos relacionados con la operación del laboratorio clínico Dx-Laboratorio, recientemente beneficiado con un contrato público.
De acuerdo con información documentada y presentada durante el encuentro con medios de comunicación, la empresa OM.I3 Agencia Creativa S. de R.L. de C.V., originalmente constituida en marzo de 2022 como una agencia de publicidad y comunicación, cambió su giro social apenas en septiembre de 2024 para convertirse en prestadora de servicios de análisis clínicos.
De agencia de publicidad a laboratorio clínico… en tres meses
Entre los elementos más alarmantes presentados se encuentran:
El cambio de objeto social fue aprobado en septiembre de 2024, modificando su giro de comunicación institucional y manejo de imagen, a la prestación de servicios de laboratorio clínico, tanto en México como en el extranjero.
El mismo día del cambio de objeto social, los socios originales —cuatro médicos— vendieron todas sus acciones a Marcela Bonilla Ramos y Marlisse Valeria Díaz Mendoza, quienes carecen de experiencia previa en el sector salud.
Posteriormente, el 31 de diciembre de 2024, las nuevas socias realizaron una capitalización de $3.45 millones de pesos, elevando el capital social a $3.5 millones, cantidad coincidente con lo requerido en las bases de la convocatoria pública emitida el 8 de enero de 2025.
Socias con historial como proveedoras de limpieza
Ambas socias han estado ligadas por años al sector de limpieza institucional:
Marcela Bonilla fue funcionaria municipal en la administración de Javier Garfio y accionista de una empresa proveedora de servicios de limpieza al municipio, Grupo Empresarial Vesiasol S. de R.L. de C.V.
Marlisse Valeria Díaz también ha sido contratista en el sector de limpieza, tanto en el gobierno municipal como estatal.
Ambas empresarias decidieron cambiar súbitamente de ramo en diciembre de 2024, creando Dx-Laboratorio, ubicado en Av. San Felipe 1014-A, sin infraestructura suficiente para operar como laboratorio clínico completo, y con evidencias de que la mayor parte de sus estudios son subrogados a otros laboratorios, particularmente Laboratorio Palmore, según fuentes consultadas.
Irregularidades en la convocatoria
Según la diputada Brenda Ríos, la empresa no cumplió con requisitos básicos de la convocatoria pública, entre ellos:
• Currículum que demuestre experiencia en el giro.
• Contrato que acredite haber brindado el servicio al menos un año.
• Licencia sanitaria a nombre de la razón social participante.
La legisladora advirtió que este tipo de maniobras generan dudas legítimas sobre la transparencia en la asignación de recursos públicos, y representan un retroceso en materia de ética administrativa.
“Estamos hablando de una empresa sin experiencia, sin infraestructura suficiente, creada con una estructura legal modificada apenas unos meses antes, y que recibió un contrato para brindar servicios médicos a los ciudadanos. Esto no solo es irresponsable, es alarmante”, declaró Ríos.
Exigen investigación
Tanto Brenda Ríos como Marco Quezada y Miguel La Torre hicieron un llamado a las autoridades fiscalizadoras y a los órganos de control para investigar a fondo este caso y garantizar que los contratos públicos no se conviertan en vehículos de simulación o beneficio particular a costa del interés público.