La estrategia para reubicar empresas que impulsaría la economía de México

Desde inicios de 2022, Estados Unidos ha incrementado sus compras a México, mientras ha reducido las importaciones provenientes de China. Gracias a este cambio, México ha alcanzado el primer lugar como socio comercial de EU, según indican economistas del banco Santander.
Esto se debe en parte al nearshoring, una estrategia adoptada por las empresas para trasladar parte de su producción a ubicaciones más cercanas, buscando acortar las cadenas de suministro y minimizar riesgos frente a crisis globales, como pandemias o tensiones geopolíticas.
En palabras simples, el nearshoring es la reubicación de una parte de la producción de las empresas a un lugar más cerca de su destino final.
Luego de la pandemia, las empresas se vieron en la necesidad de buscar cadenas de producción más cortas y que pudieran mantenerse siempre en operación.
Con el nearshoring, las empresas están más cerca de su principal mercado, lo que se traduce en una producción más barata: tanto en el salario de los trabajadores como los insumos, combustibles, electricidad e impuestos, además, permite una mejor comunicación, gestión de las operaciones y control.
Esta estrategia es el resultado de la evolución y una respuesta al offshoring (trasladar o externalizar las operaciones) y en los últimos años se ha vuelto más relevante.
Desde los 80 México ya veía los primeros atisbos del nearshoring, cuando empresas extranjeras comenzaron a invertir en el sector manufactura, ya que representaba menor costo de mano de obra y cercanía.
Con la implementación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (ahora T-MEC), en 1994, este fenómeno creció y desde entonces, la relación comercial entre México, Estados Unidos y Canadá se fortaleció.
En 2022, el expresidente de Estados Unidos, Joe Biden, implementó el nearshoring con el fin de llevar inversiones a países aliados y socios comerciales. Con este enfoque, gran parte del capital que anteriormente se encontraba en distintas regiones del mundo ya está siendo reubicado, esto, dentro del contexto de la guerra comercial que tiene con China, según explica Clemente Ruiz Durán, académico de la División de Estudios de Posgrado de la Facultad de Economía de la UNAM.
Clemente Ruiz señala que a través del nearshoring México aumentaría su capacidad de producción y con ello, financiar más importaciones.
Además de ser vecino de Estados Unidos, la participación de México en el T-MEC lo convierte en un destino atractivo para empresas que buscan establecerse cerca del mercado estadounidense.
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) indica que México podría atraer alrededor de 35,000 millones de dólares por el nearshoring.
El nearshoring no solo representa una ventaja para las compañías internacionales, sino que también impulsa el desarrollo económico de México. Un estudio publicado en una revista especializada en finanzas señala que, de aprovecharse adecuadamente el nearshoring, el país podría alcanzar un crecimiento anual del 3.7%, superando significativamente el promedio del 2.6% registrado en las últimas dos décadas. Además, se proyecta que la inversión extranjera directa se incremente de 36 mil millones de dólares en 2022 a 87 mil millones para el año 2030.