La consolidación de un proyecto nacional
Los grandes cambios deben suceder dos o más veces para ser una tendencia, una que consolide esos cambios y en este caso, un proyecto de nación que inició hace más de 7 años. Las elecciones del pasado 1 de junio en Veracruz y Durango dan continuidad a la elección del 2024 con la presidenta Claudia Sheinbaum porque la tendencia se confirma, la Cuarta Transformación crece, al igual que los partidos que la conformamos, especialmente el Partido del Trabajo, que obtiene 374 mil 320 votos en Veracruz, gobernando 28 municipios.
La confianza en el PT se reflejó en una votación histórica en Veracruz, la cual sin duda se incrementará porque los principios que persigue este proyecto coinciden con lo que la gente desde hace 7 años ha votado: continuidad en programas sociales, justicia social, pensión para los adultos mayores, apoyos a mujeres, a jóvenes, becas para niñas y niños, entre otros.
Los hombres y las mujeres hacen su historia con las condiciones históricas y políticas con las cuales la reciben, y eso han estado haciendo las y los mexicanos desde el 2018, cuando su salario mínimo era de 88 pesos y hoy, gracias a que escogieron libremente, el salario es de 248 pesos, algo que ningún gobierno, ya sea panista o priista iba a hacer jamás.
Pero 2018 fue el triunfo de un proyecto que se venía cocinando desde antes, con una izquierda que permaneció y que supo cambiar, porque la que no lo hizo, desapareció. En cambio, el PT consolida décadas de lucha incansable, de movimientos sociales: obreros, estudiantiles, médicos, maestros, campesinos y mujeres. Un movimiento al que orgullosamente pertenecen mis padres y al que siempre he pertenecido.
Ante este panorama, trabajamos desde hace años en hacer que este cambio llegue a Chihuahua porque ya lo logramos en Ciudad Juárez, el municipio más poblado de nuestro estado y que dos veces consecutivas ha elegido la continuidad de la Cuarta Transformación. Los días para el panismo se están acabando en Chihuahua, y sin duda Juárez ya es la punta de lanza en este cambio.
Y como hemos visto en las últimas elecciones, la “oposición” sale a pelear por el segundo lugar. PAN, PRI y MC se disputan ser los segundos lugares, muy, pero muy lejos de los partidos que conformamos la 4T. La realidad es que a oscuras festejan no caer más del lugar en el que están. Lejos quedaron esos triunfos a los que estaban acostumbrados, la gente abrió los ojos y poco a poco les quita cada vez más.
Les puedo garantizar que las elecciones intermedias serán la despedida del PRI, quien acompañará al PRD en su extinción, cerrando un ciclo que ciertamente se ha alargado haciendo más lenta su agonía.
El PAN buscará seguramente, como ya lo está haciendo con personajes tan funestos como la senadora Téllez, radicalizarse porque en algunos países (Argentina, El Salvador o Ecuador) la derecha ha conquistado espacios, pero México no es ninguno de ellos, no tenemos esas condiciones que permitieron que esa derecha ultraconservadora gane espacios en la vida pública.
Al contrario, lo que estamos viendo es la consolidación de un proyecto que privilegia la justicia social, abriendo paso a un país verdaderamente democrático, no al de unos cuantos.
Lilia Aguilar Gil / Analista
