¿Sirve para hacer exorcismos? Esto significan los símbolos que aparecen en la medalla de San Benito
Si te encantan las películas de terror, seguro te has fijado que en las que tratan sobre exorcismos, los sacerdotes portan consigo una medalla muy peculiar, que es la de San Benito, quien es uno de los santos más conocidos y venerados por todo el mundo. Ésta cuenta con algunos símbolos y letras que ayudan a los sacerdotes a hacer la oración necesaria para liberar a los humanos de posesiones demoníacas.
Además, también se cree que es muy milagroso, y es conocido como el “santo de la buena muerte”, pues hay quienes dicen que las personas que estén acompañados por la imagen de San Benito, tendrán un fallecimiento muy tranquilo y pacífico.
Como cada 11 de julio, se celebra el santoral católico de San Benito, quien es también Santo Patrono de Europa y fundador de la Orden Benedictina, por lo que acá te contamos un poco más sobre su historia y el peculiar significado que tienen los símbolos que aparecen en su medalla.
¿Para qué sirve la medalla de San Benito?
La Medalla de San Benito es una de las más veneradas dentro de la religión católica, especialmente por su conexión con la lucha contra el mal. Este objeto religioso es conocido por su poder en exorcismos, gracias a la reputación de San Benito que utilizaba crucifijos para expulsar demonios del cuerpo humano.
Se cree que la medalla ofrece una fuerte protección espiritual, alejando malos espíritus y proporcionando un escudo contra las influencias malignas y las tentaciones que pueden llevar al pecado.
La medalla es una herramienta fundamental en los exorcismos, utilizada por sacerdotes y fieles para liberar a las personas poseídas por demonios.
San Benito es conocido como uno de los santos de la buena muerte. Por esta razón, la medalla es frecuentemente otorgada a personas mayores o gravemente enfermas, con la esperanza de que encuentren paz y tranquilidad al momento de su fallecimiento.
¿Qué significan los símbolos y letras que están en la medalla de San Benito?
La medalla de San Benito fue aprobada por el papa Benedicto XIV en 1742, su uso y veneración se remontan a siglos atrás, destacándose como un poderoso sacramental en la protección espiritual y los exorcismos.
En la cara frontal de la medalla se encuentra la imagen de San Benito. Con su mano derecha, sostiene una cruz y, con la izquierda, el libro de las Reglas, el cual contiene las normas monásticas que San Benito estableció para sus seguidores.
En la parte inferior de la medalla, hay dos imágenes significativas:
El Cuervo con el Pan: Simboliza un intento de envenenamiento fallido contra San Benito. Según la tradición, un cuervo se llevó el pan envenenado que le habían ofrecido.
La Copa: Representa otro intento de envenenamiento fallido, en este caso, el veneno fue neutralizado milagrosamente.
Rodeando estas imágenes, se encuentra la inscripción: “Eius in ábitu nostro preséntia muniámur”, que en español significa “que a la hora de nuestra muerte nos proteja tu presencia”.
En la cara posterior de la medalla, se observa una cruz rodeada de varias letras con significados profundos:
En la parte superior, se lee la palabra “Pax” (paz), mientras que en vertical, están las iniciales C.S.S.M.L que se traducen como “La Santa Cruz sea mi luz”. En horizontal, se encuentran las iniciales N.D.S.M.D que significan “Que el demonio no sea mi guía”.
Asimismo, en los costados de la cruz, tiene las iniciales C.S.P.B. que significa “Cruz del Santo Padre Benito”. Rodeando la cruz, se encuentran las letras de una poderosa oración utilizada por San Benito para exorcismos. Estas letras siguen el orden de las manecillas del reloj y son:
V.R.S.N.S.M.V: “Vade Retro Satána, Non Suáde Mihi Vána” que se traduce como “Retrocede Satanás, no me satisfacen las cosas vanas”.
S.M.Q.L.I.V.B: “Sun Mála Quae Libas, Ípse Venéna Bíbas”, que significa “Es malo lo que me ofrendas, bebe de tu mismo veneno”.
¿Quién fue San Benito?
San Benito de Nursia, también conocido como San Benito Abad, nació en Nursia, Italia, en el año 480 d.C. Desde una edad temprana, se dedicó al estudio de la filosofía y a los 20 años se retiró a vivir en una zona montañosa. Posteriormente, se trasladó a Montecassino, donde fundó la famosa Abadía Benedictina, la primera de su tipo en Occidente, estableciendo las reglas que llevarían su nombre.
Este santo, reconocido por sus prácticas como el veganismo y los ayunos constantes, escribió la Regla de los Monjes, un manual que aún guía la vida monástica. Además, fue reconocido como un hábil exorcista, liberando a numerosas personas de la influencia del mal.
En el año 525 d.C., durante su estancia en la abadía, se narra que varios monjes intentaron envenenarlo colocando veneno en su copa, sin embargo, antes de beber, San Benito bendijo el cáliz y este se rompió en pedazos. En otro incidente posterior, intentaron envenenarlo nuevamente con un pan, pero San Benito, percibiendo la amenaza, repitió la oración y un cuervo voló para llevarse el alimento envenenado.
Además de su reputación como exorcista, se le atribuyen numerosos milagros que beneficiaron a otros. Falleció en el año 547 d.C. y fue canonizado alrededor del 1220 por el Papa Honorio III. En 1964, Pablo VI lo declaró Patrono Principal de Europa, en reconocimiento a su profunda influencia espiritual y cultural en el continente.